Murphy y Vogt, historia pura: repiten como Managers del Año en MLB

En una votación sin precedentes por parte de la Asociación de Escritores de Béisbol de Norteamérica (BBWAA), Pat Murphy, de los Cerveceros de Milwaukee, y Stephen Vogt, de los Guardianes de Cleveland, fueron elegidos como Managers del Año en las Grandes Ligas 2025. Con este resultado, ambos estrategas se convirtieron en los primeros en la historia en conquistar el galardón en sus dos primeras temporadas al mando de un equipo.

Hasta ahora, solo Bobby Cox (Bravos, 2004-2005) y Kevin Cash (Rays, 2020-2021) habían logrado coronarse en años consecutivos, pero Murphy y Vogt rompieron esa barrera con una hazaña inédita.

Stephen Vogt, resiliencia y liderazgo en Cleveland

El panorama no lucía prometedor para Stephen Vogt y sus Guardianes al inicio del 2025. Luego de una campaña 2024 destacada, el equipo sufrió un declive en rendimiento y expectativas, además de enfrentar serias adversidades: la ofensiva registró el peor promedio en la historia de la franquicia (.226) y dos de sus lanzadores más importantes, los dominicanos Emmanuel Clase y Luis Ortiz, fueron apartados bajo licencia no disciplinaria por investigaciones de MLB.

A esto se sumó el traspaso de Shane Bieber, quien recién se recuperaba de una cirugía Tommy John, hacia los Azulejos de Toronto, futuros campeones del Joven Circuito. A pesar de todo, Vogt mantuvo unido al grupo, revitalizó el pitcheo abridor en la recta final y llevó nuevamente a Cleveland a la contienda, confirmando su talento para maximizar recursos y mantener la competitividad bajo presión.

Pat Murphy, el arquitecto de Milwaukee

En la Liga Nacional, Pat Murphy ratificó que lo suyo no fue casualidad. Tras tomar el timón de los Cerveceros en sustitución de Craig Counsell —quien se marchó a los Cachorros antes de la temporada 2024—, el excoach de banca no solo mantuvo el rumbo, sino que llevó al club a títulos consecutivos en la División Central.

Su mérito cobra aún más relevancia al considerar las circunstancias: la partida de Willy Adames en la agencia libre, el traspaso del cerrador Devin Williams y un inicio desastroso con marca de 0-4 y 47 carreras permitidas, igualando un récord negativo de 1954. Con seis lanzadores lesionados y el equipo por debajo de .500 a finales de mayo, el panorama parecía sombrío. Sin embargo, Murphy logró recomponer la ruta, guiar a sus jugadores con confianza y volver a octubre por la puerta grande.

Dos líderes, una coincidencia histórica

Lo conseguido por Murphy y Vogt redefine el impacto que puede tener un dirigente en la cultura y el desempeño de una organización. Ambos transformaron la adversidad en oportunidad y demostraron que la consistencia, la gestión humana y la mentalidad competitiva pueden superar las limitaciones presupuestarias o de talento.

En apenas dos años, sus nombres ya quedaron grabados en los libros de récords como los primeros managers en conquistar el premio Manager del Año en sus dos primeras temporadas al frente de un equipo. Un logro que, más allá de la estadística, resalta su visión y capacidad de liderazgo dentro del diamante.